lunes, noviembre 07, 2005

A las 8:19

Hoy lunes, repito, LUNES, la primera llamada del día ha sido exactamente a las 8:19. Lo se porque aun estaba dormido, cuando ha sonado el maldito aparato y he pensado '¿Quién coño llama tan pronto?' al mismo tiempo que miraba el reloj del ordenador. Normalmente la primera llamada no es hasta pasadas las 8:30, y aun a esa hora tengo más ganas de seguir durmiendo que de atender lusers simpáticos compañeros de trabajo.

- Ouuuaaaaah, sí, ¿digame? ouaahhh
- Hola, soy $secretaria
- [Ay dios....]
- ¿Cómo puedo abrir un fichero con extensión punto equis ese i?
- Ni [puta] idea...
Se oye al fondo una voz que dice algo
- Me dicen que es de Open Office, una presentación.
- Ah, pues... eso, con el Open Office, pero tu no lo tienes instalado.
- ¿Y me lo puedes instalar?
- Sí, podría, pero... ¿De dónde ha salido ese fichero?
- Bueno, son dos, los ha hecho este fin de semana $jefazo con su portátil en casa.
- ¿Portatil? ¿Portatil de $empresa?
- No, bueno, es suyo personal...

[Silencio de dos segundos] Como no me he levantado con el pie izquierdo, la pobre $secretaria no tiene la culpa, y además se puede haber ganado un adepto para la causa del software libre, finalmente accedo:

- Bueno, vale, mándamelos, te los convierto a PowerPoint, y luego le mando un correo a $jefazo explicándole cómo los ha de guardar con el Open Office para que cuando se los traiga luego a $empresa los pueda abrir.

Y sí, me encantaría que en toda la empresa tuviéramos Open Office en lugar de M$ Office, pero solo hay una cosa peor que esto último, y sería tener que instalar y mantener ambas suites a la vez en todos los equipos.

Cuando toque cambiar, ya veremos lo que hacemos, ya veremos...

P.D. Para nombrar a los usuarios de este post he cambiado mi habitual notación basada en un capítulo del clásico Crónicas Marcianas por la notación de variables de shell que se usa en la página de Bofhers.

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